Proyecto de Ordenanza

 

VISTO, el crecimiento exponencial del porcentaje de personas que padecen enfermedades crónicas no transmisibles y problemáticas relacionadas a la salud mental, y los grandes avances científicos respecto del origen de muchas de ellas, de cómo prevenirlos, y de cómo mejorar su condición a través de hábitos de vida saludables,

CONSIDERANDO,

Que, de acuerdo a la Constitución Nacional argentina, la salud es un derecho humano fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás derechos humanos.

Que, según la OMS, las enfermedades crónicas no transmisibles (ENT) son la principal causa de muerte y discapacidad en el  mundo.

Que, la epigenética es el campo que estudia como los genes pueden ser modulados según el ambiente en el que se encuentran. De esta forma, mejorando el entorno, se “prenden” o “apagan” genes que determinan si enfermamos o no. Esta modulación de nuestro ADN puede lograrse a través de todo lo que absorbemos. Y cuando hablamos de absorber, no se hace referencia solamente a los alimentos, sino a todo aquello a lo que estamos expuestos: los alimentos que consumimos, el aire que respiramos, las emocionamos que nos inundan, las personas con las que nos relacionamos, etc.

Que, muchas de estas enfermedades se pueden prevenir mediante la reducción de factores de riesgo comunes como el consumo de tabaco, drogas, consumo nocivo de alcohol, la inactividad física y la alimentación poco saludable.

Que, otras condiciones importantes también son causadas por estos factores de riesgo, también se consideran enfermedades no transmisibles, que incluyen las lesiones y los trastornos de salud mental.

Que, la vida moderna en la era tecnológica ha contribuido negativamente a un estilo de vida sedentario.

Que, el sistema de salud esta históricamente organizado y financiado con un altísimo presupuesto, en base al tratamiento y atención de estas enfermedades,  y no en la prevención de las mismas.

Que, la mejor medicina es la que previene.

Que, la medicina funcional considera al individuo como un todo integrado por lo físico, lo emocional y lo espiritual. A diferencia de la medicina convencional, que fragmenta al cuerpo humano, trata síntomas y se encarga de resolver procesos agudos, la medicina funcional trata a personas y considera a la enfermedad como el resultado de un desequilibrio en la integridad de las mismas.

Que, este enfoque le da el rol protagónico al bienestar integral y se basa en la medicina preventiva, que busca llegar a la causa raíz de la enfermedad.

Que, el conocimiento sobre cómo prevenir enfermedades crónicas no transmisibles no está al alcance de toda la ciudadanía y resulta necesario brindar información fehaciente y con sustento científico sobre cómo mejorar nuestra calidad de vida.

Que, alimentarse bien es la herramienta más poderosa, es capaz de modificar genes, inflamaciones y procesos nocivos para el organismo.

Que, el metabolismo y su funcionamiento son hoy el punto de mira de la ciencia para comprender el origen y encontrar posibles soluciones a las afectaciones más comunes en la salud de los habitantes de este nuevo milenio.

Que, la evidencia investigativa sobre este el tópico antes mencionado tiene serias repercusiones en el funcionamiento del metabolismo. Los malos hábitos alimenticios y la vida agitada, entre otras cosas, obligan a nuestro organismo a transitar por caminos antinaturales que tarde o temprano desembocan en padecimientos de toda índole e, incluso de obesidad, fatiga, estrés, insomnio, depresión, diabetes, cáncer, y enfermedades autoinmunes y cardiovasculares, entre muchas afecciones más.

Que, las personas que tienen dietas no saludables son más propensas a tener síntomas de depresión u otros problemas de salud mental.

Que, la alimentación basada en comida real y los buenos hábitos como el descanso, evitar la exposición a la luz azul (pantallas, luz fría), aumentar la exposición al sol, el descanso adecuado respetando los ritmos circadianos, la hidratación y realizar actividad física.

Que, afortunadamente, en los últimos años se ha generado una conciencia masiva sobre la importancia de la alimentación como pilar fundamental, no solo para prevenir la enfermedad, sino para mejorar nuestra calidad de vida.

Que, en relación a la educación alimentaria, ha sido sancionada en nuestro país la Ley de Etiquetado frontal, lo cual significo un gran avance para la concientización sobre el consumo de  alimentos procesados y ultraprocesados, pero aún falta un largo recorrido en términos de educación y acceso al conocimiento.

Que, mejorar el bienestar físico y mental de las personas contribuye a mejorar la calidad de vida de toda la ciudadanía y a optimizar los recursos destinados a la atención y tratamiento de enfermedades crónicas no transmisibles.

Que, desde la Subsecretaria de Salud Pública y Subsecretaria de N, N Y A, se llevan a cabo diferentes programas y acciones en relación al consumo de tabaco, consumo problemático de sustancias y obesidad.

Que, resulta necesario implementar en el Estado municipal acciones destinadas a la educación de hábitos saludables, atendiendo las necesidades diferentes sectores de la comunidad, garantizando el acceso a la información sobre cómo mejorar nuestra calidad de vida.

 

Por todo lo expuesto el Bloque JUNTOS, eleva el siguiente Proyecto de Ordenanza:

Artículo 1° Crear en la Municipalidad de Saladillo un programa de salud integral interdisciplinario, articulando las áreas de Educación, Salud y Deportes y Recreación, destinado a la prevención de ENT y la educación  sobre hábitos de vida saludables que apunten a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas, a través de  clases grupales a en los CAPS y Clubes deportivos sobre los siguientes ejes:

 

  • Hábitos saludables: métodos para desarrollar buenos hábitos  eliminar los malos. Biohacking: como controlar el entorno y favorecer nuestro sistema inmunológico. Ritmos cicardianos. Mindfullness.
  • Nutrición: comida real, elaboración de alimentos, interpretación de tablas/información nutricional de alimentos procesados y ultraprocesados, planes de alimentación, salud gastrointestinal/microbiota. Alimentación anti inflamatoria.
  • Actividad física: Entrenamiento en clases grupales, que combinen las diferentes capacidades: fuerza, resistencia, velocidad y destreza (flexibilidad, coordinación, equilibrio y agilidad).

 

Artículo 2°: Incluir en el programa capacitaciones sobre medicina funcional, PNI (psiconeuroinmunologia clinica) para profesionales que se desempeñen en el ámbito municipal

 

Artículo 3° De forma

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